La ausente temporalidad del amor

Hoy me preguntaba: ¿De qué trata el amor infinito? ¿El amor tiene un tiempo de duración? ¿Algunos vienen con fecha de vencimiento? ¿Qué significa el amor infinito mientras dure, que tanto decía Vinicius?

El amor no es una línea de tiempo. Aunque las relaciones humanas crean tener su principio y, quizás, su fin, el amor no es medible. No puedo concebir la cuantificación del amor y menos que menos como un experimento.

Las ciencias sociales, humanas avanzan hacia todos los tópicos que alberga nuestra vida cotidiana. Pero pocos son los que hablan del amor como un discurso, un sentimiento diferente, que resiste a toda metodología y comprobación científica. El amor no es un tratado científico. En esta línea, el amor no es observable, sino vivido.

Con el amor le damos sentido a nuestra vida, cada día tiene una connotación peculiar ante el llamado del amor. Vos sabes que ya no me limito sólo al amor entre personas, sino a ese amor a los sueños, los valores, los proyectos y los ideales.

Y acá se concatena con la revolución. Una vez que el amor se hace piel marca un antes y un después. No es lo mismo vivir en la cima del amor que enfrente. No es lo mismo mirar desde los anteojos del amor que hacer la vista grosa.

Pero retomando la frase de Vinicius me detengo a pensar qué quiere decir con “el amor es infinito mientras dure” ¿Acaso lo circunscribe a un período? ¿Sugiere que el amor tiene un límite temporal? No creo que Vinicius vaya en esa línea. Pero la frase es un disparador para que piense y me cuestione, en esta tardecita de lluvia.

El amor no es medible. Los sentimientos no pasan por una calculadora, aunque se multiplican. Pero es una ecuación en otro sentido.

Vos, yo y nosotros creemos en la infinitud del amor. Cuando queremos a alguien, cuando amamos nuestros sueños no abrimos un plazo fijo, ni una cuenta corriente. Esa idea ronda en nuestra veloz sociedad, que respira al ritmo del delivery.

Hablar de la infinitud del amor me hace pensar en la resistencia y en la fortaleza. Esa frase me hace pensar que está buena la revolución por el amor, porque es el centro del amor de todos los tiempos.

Hablar de la infinitud del amor es proporcionalmente inverso a la temporalidad orgánica de la sociedad.

Hasta todos los momentos.