GiraRena: parte I

Pueblos, pueblitos ya recorridos. He caminado con la gente, tomé mate con los vecinos y me llevaron a realizar una serie de circuitos para propagar los postulados de la revolución por el amor revolucionario.

Mi primer parada fue en el monumento al mate. En este lugar, camaradas mí@s, he convocado a las personas a alabar el mate como uno de los baluartes revolucionarios. El mate es una de las piezas claves para expandir mi revolución renatista. Te preguntarás: ¿por qué? Porque con el mate compartimos hasta nuestros más íntimos secretos, en cada sorbito compartimos las adivinanzas de todos. En síntesis, el mate nos brinda un camino de ida, pero no de vuelta.

Segunda parada: monumento al cebú. Este paraje es el más complicado de analizar, dado que sufrí una serie de presiones por parte de los pobladores, ya que no considero que el cebú sea revolucionario. ¿Qué decirles? Los pobladores se sienten sumamente identificados con esta especie. Ellos alegaron que el cebú transmite sentimientos, ilusiones y sueños. En esta parada negocié con los pobladores y decidimos que el cebú está calificado en la lucha revolucionaria.

Estos son los pasos de mi gira. Por ahora, la revolución por el amor revolucionario va sembrando sus semillas.

Hasta todos los momentos.